jueves, 12 de marzo de 2020

Las cuitas



No hay selvas ni montes ni mares
ni cielos vestidos de azules
no hay rojos ni malvas ni gules
que puedan llenar tus altares.

No hay ni oro ni plata ni sedas
ni prendas, regalos ni flores
no bastan todos los colores
que puedan ceñir tus veredas.

No encuentras la paz que serena
en gemas o en piedras preciosas
No importa cuán sean hermosas
las joyas si luego traen pena.

Y el llanto que moja y que brillas
es claro compás de emociones
es dulce clamor de pasiones,
rocío que adorna mejillas.

Las cuitas son sólo enseñanzas
que vuelven más blando y más pío
al verbo que es gota de río
fluyendo hacia un mar de esperanzas.






Distorsión de realidades


Distorsión de realidades
cúmulo de mentiras
disfrazadas de verdades.

Con un mar de identidades
me estremezco irreverente
y me escondo entre la gente
en la cal de vanidades.

Y este cielo casi cieno
ya no ensucia, ya no mancha
ya no queda mucha cancha
para andar desmesurado
ingiriendo mas veneno.

Con las manchas del leopardo
con los ojos del jaguar
voy mirando un mundo pardo
que se encierra en un ajuar
de floridas inquietudes
y de vagas necedades.

Distorsión de realidades
solapando todo engaño
con sus falsas veleidades.




Mentiras



Mentiras paridas por temores y fobias
engaños generados por el miedo feroz engendrados, no creados.

¿Acaso desconfías de mi dulce comprensión?
¿Acaso no demuestro que no juzgo ni condeno?

La mentira cabalgando sobre vientos tempestuosos
alimenta veleidades
desconfianzas
soledades
y cien mil enemistades.

El temor engendra engaño
aunque a veces
es el oportunismo el que engaña
buscando la ventaja
a costa del ingenuo
sobre el cadalzo del inocente.

Hay mentiras por temor
hay mentiras por amor
hay mentiras por envidia
hay mentiras sin conciencia
hay mentiras por maldad

A decir verdad
todo el mundo miente
alguna vez en su vida.